miércoles, 18 de febrero de 2015

DE MI MUERTE COMO CAZADOR

 

Sí, es cierto, no podría ser de otra forma, 
la soledad me conforta y tu ausencia me brinda placeres
 
que a tu lado no encontraba.
 

Tú me lo has dicho y yo nunca lo he negado.
 
Que soy como un alma perdida,
 
un ente que naufraga en el mar de los olvidados.
 

Y pese a que no soy más que un desolado lobo estepario,
 
mi espíritu se quebranta ante la inmensidad asoladora
 
que tiernamente me infunde tu olvido.
 

No puedo continuar sin ti,
 
aunque tú ya no desees estar conmigo.
 

Te cazaré como un enorme león a un pequeño siervo,
 
que lo toma por el cuello para destazarlo y consumirlo
 
hasta el final del ocaso.
 

De tu cuerpo extirparé tu corazón cuando lata aún vivo.
 
Lo conservaré junto al mío mientras me dirijo
 
a mi reunión con el destino,
 
que me aguarda en el fondo del abismo
 
donde alguna vez estuvieron mis ilusiones.
 





                                                                                                           
   Leonardo Guedázz

DUELO



¡Lástima! El destino poco a poco nos fue alejando. Hoy mi mente se ocupa de ti. Trata de visualizar los días que vienen sin verte. Siento mi corazón oprimirse. Trato de pensar en otra cosa... leo un libro... nada... Pienso en la posibilidad de que llegues a mi puerta y me regales un gran abrazo. Pienso en besarte... darnos el beso que jamás nos dimos. Pienso en tu futuro y en el mío, y en cuanto tiempo pasará para acostumbrarme a tu ausencia, porque nunca dejaré de extrañarte. Tal vez nuestro tiempo sea en otro momento, cuando tu vida esté resuelta y la mía también. No dejo de pensar en que el destino nos tiene preparado algo en un futuro y eso me hace sonreír. Pienso en tu sentir y tus pensamientos. Pienso si tu corazón también se oprime al pensar en mi y en mi ausencia. También pienso en tu felicidad y en lo increíble que sería que fuera conmigo. Pienso en dejarte ir... y pienso sin cesar si algún día sentiré con alguien más lo mismo que siento estando contigo.
                                                                                                                              G.A.B.R.

¿QUIÉN ES ÉL?




¿Quien es él? Esa persona que me intriga, me confunde y aún así me tiene fascinada. No dice mucho, es atento a las circunstancias. Cada que me toca siento una innegable sensación de calidez que me eriza la piel. No logro entender como lo hace. Por una parte creo que lo entiendo y por otra no estoy segura como es. Me alegra tan solo tener una plática con él, me intriga saber como piensa. Se ausenta en ocasiones y no da explicaciones. Es reservado y a veces creo que logra entenderme, después me confunde de nuevo y empiezo desde cero. Me frustra y me rindo, luego lo veo de nuevo y me atrae como a una presa, me envuelve en sus misterios y deseo conocerlo ¿Quién es él, que hace dar vueltas a mi cabeza?
                                                                                                     G.A.B.R.

Se pasó una hora buscando las llaves...


Se pasó una hora buscando las llaves. No las encontraba por ningún lado. Buscó debajo de los sillones, en los cajones de la cocina, hasta en el cuarto de lavado… pero las llaves nunca aparecieron. Rondaba por la casa pensando dónde habría podido dejarlas. El problema no eran las llaves, lo que quería, era el llavero que le había regalado su abuela. Un guardapelo que contenía un mensaje dentro, un simple: por siempre. No era mucho en físico, pero era enorme en significado. Es por eso que no se rendía en su búsqueda.
Mientras pasaba a lado de una lámpara que tenía en forma de luna, recordó que había subido a la azotea para acostarse a ver las estrellas como lo hacía con su abuela. Inmediatamente fue corriendo como jalada por algún tipo de energía. Abrió la puerta. Allí estaban, reposando tranquilamente en el suelo. Existiendo ahí, debajo de la luz de la luna. Sonrió de oreja a oreja al tocar el guardapelo y lo abrió para darse cuenta que había una mancha en forma de un pequeño corazón. Lo sabía, su abuela seguía cuidándola a pesar de que hacía poco se había unido con el universo.


                                                                                                                                  G.A.B.R.